8 de enero de 2018

Spermbot: El espermatozoide robot

El nacimiento del primer bebé concebido por fecundación in vitro (FIV) hace 39 años supuso un antes y un después en el campo de la reproducción asistida. Este logro unido a los avances en el campo de la nanotecnología ha permitido que un equipo del Instituto de Nanociencias Integrativas de Dresde (Alemania) liderado por el Dr. Oliver Schimidt haya desarrollado el Spermbot.

A pesar de que escuchar el término Spermbot o espermatozoide robot pueda sonar a ciencia ficción, lo cierto es que es una tecnología muy real que consiste en el ensamblaje de un microdispositivo a un espermatozoide.


Actualmente en España sufren problemas de infertilidad alrededor de unas 800.000 parejas. En un 30% de los casos se debe a un factor masculino ¿Pero cuáles pueden ser las principales causas de infertilidad en el hombre? La oligospermia y la astenospermia acaparan un 40% de los casos. La primera hace referencia a la disminución en la producción de espermatozoides, la segunda a una disminución de su movilidad.

Hoy en día estas dos deficiencias son tratadas con las técnicas actuales de reproducción asistida como son la fecundación in vitro (FIV) y la microinyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI). Ambas técnicas requieren de la extracción de los ovocitos de los ovarios de la mujer para fertilizarlos fuera del cuerpo y transferir unos días más tarde los embriones al útero. La aplicación de los Spermbots evitaría la extracción de los ovocitos promoviendo así una fertilización en condiciones más naturales. Además, podrían ser útiles para empujar aquellos espermatozoides con movilidad reducida y, en los casos de bajo recuento espermático, podrían guiarlos hasta el ovocito sin que se pierdan por el camino.

En una de las últimas publicaciones de la revista Advanced Materials se presentan dos tipos de Spermbots, uno cilíndrico y otro helicoidal. La diferencia radica en que el Spermbot cilíndrico utiliza un espermatozoide móvil como fuerza motriz para propulsar el microdispositivo. En cambio, en el Spermbot helicoidal es el microdispositivo el que propulsa al espermatozoide, siendo este la carga que debe ser transportada. 
                         
Spermbot cilíndrico (izquierda) y Spermbot helicoidal (derecha)

Ambos enfoques de estos llamados Spermbots se han desarrollado durante los últimos años usando espermatozoides bovinos debido a su similitud morfológica con el espermatozoide humano. Hoy en día todavía no han sido testados en humanos pero apuntan a una futura aplicación en la reproducción asistida.

El Spermbot helicoidal es una microestructura en forma de hélice que captura y transporta los espermatozoides con baja movilidad actuando como una "prótesis" que se acopla al espermatozoide y lo ayuda a llegar hasta el ovocito para fertilizarlo. Para poder capturar el espermatozoide se aplica un campo magnético rotativo externo que impulsa la micro hélice previamente magnetizada hasta el espermatozoide que es capturado por la cola de manera que empuja la cabeza hacia delante. Los espermatozoides son capturados uno a uno lo que requiere mucho tiempo. Una vez capturado y transportado hasta el ovocito, el espermatozoide se puede liberar invirtiendo la rotación de la hélice. 

El Spermbot helicoidal es especialmente atractivo para tratar la infertilidad masculina motivada por una disminución en la movilidad de los espermatozoides. También cuando hay un defecto en la quimiotaxis, permitiendo orientar correctamente el espermatozoide hacia el ovocito.

Spermbot helicoidal. Espermatozoide capturado y transportado hasta el ovocito por el microdispositivo en forma de hélice

El Spermbot cilíndrico consiste en un microtubo que captura un solo espermatozoide móvil en su interior quedando la cola fuera para propulsar el microtubo hacía delante. En este caso, para que el microtubo se acople al espermatozoide se añade una gran cantidad de microtubos a una muestra de esperma diluida, de manera que los espermatozoides móviles se introducen de forma aleatoria en su interior. La dirección del Spermbot cilíndrico puede ser controlada mediante un campo magnético externo debido a que los microtubos contienen una capa de titanio y hierro. La liberación de los espermatozoides de los microtubos se produce aplicando un ligero incremento de la temperatura en la muestra, de manera que el microtubo se abre permitiendo la salida del espermatozoide.

El Spermbot cilíndrico resulta atractivo para tratar la infertilidad masculina que se debe a un bajo recuento espermático. También se ha demostrado su uso para separar espermatozoides móviles de aquellos que no lo son en una muestra de semen. Este es un paso importante para que una fertilización in vitro tenga éxito.

Spermbot cilíndrico. A) Representación esquemática del espermatozoide y el microtubo. B) Espermatozoide en el interior del microtubo, imagen obtenida de un microscopio electrónico

Los Spermbots también podrían servir como herramientas de exploración para obtener más información sobre la migración de los espermatozoides a través del tracto reproductivo femenino, así como para conocer los obstáculos que tienen que sobrepasar para llegar hasta su destino final: el ovocito. Esto nos ayudará a comprender mejor cuales son las razones de las distintas causas de infertilidad. Otra potencial aplicación de los Spermbots podría ser el transporte y liberación de distintos fármacos de forma controlada, de manera que el fármaco podría ser incluido en la superficie externa del microtubo o podría ser encapsulado en el interior del espermatozoide.

A pesar de que guiar y transportar espermatozoides in vitro mediante el uso de Spermbots funciona de manera muy precisa, en condiciones in vivo las cosas cambian. Los espermatozoides tienen que hacer frente a condiciones muy diferentes y deben afrontar distintos obstáculos. En experimentos realizados in vitro con espermatozoides y ovocitos bovinos vieron que los Spermbots tanto cilíndricos como helicoidales no podían atravesar las células del cúmulo, que son células que rodean el ovocito y que el espermatozoide debe atravesar para poder realizar la fertilización. Hasta el momento se han ideado dos estrategias: Spermbots portadores de enzimas que puedan aflojar o eliminar la capa de células del cúmulo bioquímicamente, o mediante perforación mecánica con microestructuras capaces de ejercer una gran presión en una pequeña área.

Dado que los Spermbots podrían estar destinados a aplicarse en el cuerpo humano, debe aclararse qué les sucede después de que hayan completado su tarea ¿Cómo pueden ser eliminados? Las microestructuras magnéticas pueden eliminarse de la misma forma en la que se introdujeron, mediante la aplicación de un campo magnético que los guiará para su expulsión. Otra alternativa sería usar materiales biodegradables que puedan permanecer dentro del cuerpo sin generar efectos negativos a largo plazo, como podría ser el hierro debido a su metabolismo en nuestro cuerpo. Por ejemplo, a una mujer adulta de entre 19 y 50 años se le recomienda un consumo de 18 mg/día de hierro.

A pesar de que la propuesta tecnológica de los Spermbots todavía dista de ser aplicada en la reproducción asistida o como herramienta de entrega de fármacos, hay que tener en cuenta que ofrece muchos aspectos interesantes en procesos de control a distancia. No hay que perderles la pista ya que presentan un gran potencial en investigaciones de migración de esperma in vivo y, eventualmente, en tecnología de reproducción asistida.  


Bibliografía

Magdanz, V., Medina-Sánchez, M., Schwarz, L., Xu, H., Elgeti, J., & Schmidt, O. G. (2017). Spermatozoa as Functional Components of Robotic Microswimmers. Advanced Materials, 29(24), 1–18. https://doi.org/10.1002/adma.201606301

Magdanz, V., Sanchez, S., & Schmidt, O. G. (2013). Development of a sperm-flagella driven micro-bio-robot. Advanced Materials, 25(45), 6581–6588. https://doi.org/10.1002/adma.201302544

Magdanz, V., & Schmidt, O. G. (2014). Spermbots: potential impact for drug delivery and assisted reproductive technologies. Expert Opinion on Drug Delivery, 5247(September 2015), 1–5. https://doi.org/10.1517/17425247.2014.924502

Medina-Sánchez, M., Schwarz, L., Meyer, A. K., Hebenstreit, F., & Schmidt, O. G. (2016). Cellular Cargo Delivery: Toward Assisted Fertilization by Sperm-Carrying Micromotors. Nano Letters, 16(1), 555–561. https://doi.org/10.1021/acs.nanolett.5b04221

Tottori, S., Zhang, L., Qiu, F., Krawczyk, K. K., Franco-Obregõn, A., & Nelson, B. J. (2012). Magnetic helical micromachines: Fabrication, controlled swimming, and cargo transport. Advanced Materials, 24(6), 811–816. https://doi.org/10.1002/adma.201103818

Páginas web consultadas

A new way to make babies: Spermbot”. Revista National Geographic. Consultado el día 22/12/2017.

Institute for Integrative Nanosciences (IIC). Consultado el día 3/1/2018.


Jennifer Ferrandiz Ward


Máster Biología y Tecnología de la Reproducción (2017/2018)